Emoción, nervios, miedo… estamos en semifinales y no podemos fallar. Es el partido definitivo para alcanzar nuestra meta y los errores no están permitidos. Sé que es mucha la presión a la que deben enfrentarse los jugadores pero hay muchas ilusiones puestas en esta competición y todos quieren lo mejor para el equipo. Lleva varios años sin alcanzar una final en esta competición y ahora tiene la oportunidad de lograr aquello que tanto anhela, ser campeón de Europa. Ya sé que lo importante es participar y todo eso, pero esta vez no se van a conformar con participar, quieren llegar a la final y poder disfrutarla. Luego, lo que pase en esos últimos 90 minutos… Dios dirá. Mientras, saborean las eliminatorias y viven con intensidad cada jugada, cada incidencia que se produce en todos y cada uno de los partidos.
Ha llegado el momento de dejarse llevar. Que sean los hechos y el azar los que marquen el camino en lugar de tratar de ser una misma la que se empecine en abrir sendas por en medio de la jungla. Ahora hay que relajarse y dejar las preocupaciones a un lado. Llega el buen tiempo y hay que disfrutarlo. Hay que disfrutar cada acontecimiento. Compartirlo con los que tienes a tu alrededor. Saborear los detalles y quedarse con el buen recuerdo. Y esperar a ver qué pasa. Que sean las circunstancias las que elijan.
Me siento en el escritorio. Saco los apuntes. Los lápices de colores. El sacapuntas. Elijo la música. Ajusto el volumen. Lo tengo todo listo para empezar a estudiar. En ese preciso momento me acuerdo que tengo que hacer una llamada. Hago la llamada. Vuelvo a la mesa. Mientras leo las dos primeras líneas me doy cuenta que tengo sed. Me levanto. Voy a la cocina. Cojo una botella de litro y medio de agua. Vuelvo a la mesa. Empiezo el ritual de nuevo. Uf. He comido muy poco a mediodía. Necesito merendar. Me vuelvo a levantar. Vuelvo a la cocina. Abro la nevera. Cojo lo que me apetezca en ese momento. Me preparo la merienda. Meriendo. Vuelvo al escritorio. Consigo estudiarme dos o tres párrafos seguidos. Recuerdo una conversación que tuve hace dos o tres días. Vuelvo a leer. Recuerdo algo que me pasó hace un mes. Vuelvo a los apuntes. A ver si esta tarde me llama alguien y salgo a tomarme una cerveza. Los apuntes. Los apuntes. Releo lo estudiado. Vale. Me lo sé. Empiezo otro capítulo. Suena el teléfono. ¿Hola? ¿Qué si quedamos a tomarnos algo? Bueno. Pero algo rápido que tengo que estudiar…
Anoche cené un kebab. Tenía pensado cenar un batido ligerito en casa pero una llamada de última hora me hizo cambiar de planes. Supongo que cenar un kebab no es nada extraño para muchos. De hecho, cada vez es más habitual oíros decir que habéis ido a un kebab a por la cena. Y la verdad es que cada vez hay más establecimientos de estos por la calle. Pero para mí fue todo un acontecimiento porque no cenaba nada de eso desde mi época de Londres (y entonces lo hacía por motivos económicos, era más barato que el burger). Una cosa sí que descubrí, sigue sin gustarme demasiado, pero estaba bueno. Claro que esta vez estuvo acompañado de una conversación de lo más interesante que derivó en un listado de canciones elegidas expresamente para marcar el rumbo de nuestras vidas… y en eso estamos, colgándolas en el blog secreto y subrayando las estrofas determinantes…
P.D. por cierto, he encontrado otra más para tu lista, a la tarde te la paso.
Esta mañana iba con prisas y no he podido poner la música... esta es de una de las listas, jijiji
Hoy me han puesto deberes. Después de las fiestas de Semana Santa, la Pascua y San Vicente hoy vuelvo, esta vez de verdad, a la cruda realidad… así que antes de volver a enfrascarme en la divertida tarea de memorizar los Títulos de la Constitución voy a ser buena y haré los deberes que me ha mandado Lidón, espero aprobar el examen, señorita!
¿Un buen lugar para relajarse? La playa cuando no hay nadie, por supuesto. ¿Te echas la siesta? Eso no puedo evitarlo, soy demasiado dormilona y nunca consigo ver acabar el telediario, siempre caigo antes. ¿Quién ha sido la última persona a la que has abrazado? Alguien a quien he aprendido a apreciar y con quien estoy muy a gusto. ¿Tu plato preferido para la cena? Últimamente ceno poco, pero si tengo hambre prefiero un batido de fresas (leche de soja y unas cuantas fresas, nada de azúcar, nata, helado o algo parecido, eh?). ¿La última cosa que te has comprado? Una camiseta a rayas, como no. ¿Qué escuchas ahora mismo? Joy Division para estudiar, La Casa Azul para pasear, Nacho Vegas, para dormir y Locksley para relajarme. ¿Tu estación del año preferida? Definitivamente la primavera, a pesar de los picores del azahar, porque el verano a saber cómo llega. ¿Qué tienes en tu armario del baño? Creo que de todo, de hecho a veces cuesta cerrarlo. Dí algo de la persona que te pasó este meme. Pues… creo que es mi mejor amiga. Aunque creo que tenemos un serio problema de adicción con los sms y los mails, blogs, facebook… Lidón, ¿és precís que estemos siempre en contacto? ah! y me conoce demasiado bien, pero creo que eso es bueno. Si pudieras tener una casa totalmente amueblada gratis en cualquier parte del mundo, ¿dónde te gustaría que estuviera? Lidón me ha quitado la respuesta, yo elegiría un barco pero como ya lo tendría ella elegiría una casa en Nueva York para poder irnos de compras y de pendoneo. ¿Lugar favorito de vacaciones? Uno en el que necesite el pasaporte y que tenga muchas cosas para ver. ¿Cómo tomas el café? No suelo tomar café, soy más de té, pero si lo tomo es con Marie Brizard quemadito, jiji. ¿De qué te gustaría librarte? ¿Ahora? de la Constitución y de alguna neura, claro. ¿Qué querías ser de pequeña? Ingeniero, pero ya ves como he acabado. ¿Qué echas de menos? Independencia económica. ¿Qué estás leyendo ahora mismo? Varias cosas, Fiebre en las gradas, de Hornby, Rant, de Chuck Palahniuk, y estoy releyendo El jugador, de Dostoievski. ¿Cuál es tu marca preferida de vaqueros? Ninguna, con que me siente bien me vale. ¿Qué pieza de diseñador de ropa te gustaría tener (nueva o vintage)? ¡Las quiero todas! ¿Vivirías tu vida de otra manera a como la vives ahora? No creo, haría alguna variación pero básicamente no. ¿Volverías a crear el blog? Sí, mola. La pregunta de Nameji es: NO podrías vivir sin... música La pregunta de María es: ¿Con que celebridad te identificas? ¿He de indentificarme con alguien? La pregunta de Adegea es: Físicamente, ¿quién es tu hombre ideal? A estas alturas el físico ya no es importante. La pregunta de Xocolat es: ¿Qué prenda (ropa, calzado o complemento) tienes en casa que tenga mucho valor sentimental para ti y explica porque? Una camiseta a rayas, claro, de colores que tengo desde Londres. Es la camiseta del buen humor. La pregunta de La Ratona Presumida: ¿en el armario de qué famosa te gustaría perderte? En alguno muy grande y con muchos zapatos. La pregunta de Montoyica: ¿Cual es la combinación de colores que más usas? Fucsia y azul. La pregunta de Madame de Chevreuse: Tres cosas de las que te sientas orgullosa: y yo que se!! La pregunta de Maba: ¿cambiarías algo de ti misma? Uf, sí, sí, pero no voy a hablar aquí de mis defectos. La pregunta de Lidón: ¿Qué tienes en la mesita de noche? Je, je. Dos despertadores, un bote de crema hidratante, libros, el mando de la tele, agua… a veces se caen las cosas al suelo. Mi pregunta: ¿Con quién te gustaría estar ahora? Con alguien que me hiciera sentir cómoda y relajada, no hay muchas personas que cumplan esos requisitos, aviso.
Lidón, ya he contestado a todas las preguntas y habrás podido comprobar que me he escaqueado poco, así que quítame la nominación que me echarán de la casa. ¿Lo he hecho bien? para lo torpe que soy con estas cosas a mi me parece que no está mal. El problema es que ahora no se a quién pasarle el meme... ¿alguien acepta el reto?
Ya ha acabado un fin de semana raro. Empezó tranquilito. El viernes en casa a hacer bondad. El sábado fue muy raro. Chateando por la tarde jugando a desafíos literarios y poniendo en jaque la imaginación de los participantes. Algo más que interesante y altamente recomendable para el ejercicio de nuestra imaginación que a veces de no usarla se queda atrofiada. La noche fue algo mejor y acabó de forma inesperada. El domingo fue más raro si cabe. Empezó bien, se torció a mitad y acabó con unas cervezas de más en buena compañía. ¿Qué más se puede pedir? Por en medio alguna que otra mentirijilla, alguna que otra media verdad y algún reencuentro con sorpresa incluida. Aquí os dejo la foto que me he hecho esta mañana con mi mejor cara de resaca.Y sí, todavía sigo probando como peinarme el flequillo, que hasta que no me crezca del todo no se que hacer con él. Y la canción... que cada uno la interprete como quiera...
Ya se han acabado las vacaciones, aunque ya tenemos aquí el fin de semana así que tampoco lo he notado demasiado. Después de tantos días sin hacer nada, me refiero a los estudios, la semana que viene prometo firmemente encerrarme a empollar y recuperar el tiempo perdido. Así que aviso que voy a volverme a encerrar para estudiar pero a partir de las ocho y media de la tarde estaré libre, que no es cuestión de acabar con mi vida social así como así.
Esta semana, aunque parezca lo contrario he hecho muchas cosas pero sobre todo he hecho gorritos. Ya tengo dos acabados que me han quedado muy bien pero todavía tengo que hacer muchos más si quiero poner el puesto en el mercadillo. Y sólo me queda un mes!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
Aunque el recuerdo de la semana lo dejo para el picnic en la playa del martes. Fue la primera tarde de playa de la temporada y ya tengo la marca del suje en la espalda… ni siquiera nos pusimos el bikini pero después de tantos meses de frio inauguramos la primavera de la mejor de las maneras.
Ayer fue un gran día. Salió el sol después de varios días grises y desconcertantes. Fue un día muy largo porque comenzó a las doce de la noche cuando alguien consiguió sacarme de casa después de mucho tiempo sin tener ganas de hacerlo, y eso estuvo muy bien, y me lo pasé mejor que bien.
Estos días han sido de reencuentros y descubrimientos. Reencuentros con amigos olvidados y descubrimientos de aquellos a los que no había sabido ver, aunque también tuve mi parte de descubrimiento desagradable, pero… a fer la mà la bicicleta, que la Madre Teresa de Calcuta ha decidido tomarse unas vacaciones, que ya está bien de estar pendiente de todos, que luego me acaban llamando pesada, encima, es que…
Ayer por fin pude tomar un poco el sol y ponerme bikini, en el que, por cierto, casi no quepo. Tengo dos opciones, dejar de comer o comprarme uno más grande… que difícil elección…
El día acabó como empezó, muy bien. En sofá ajeno viendo algo totalmente vergonzoso por la tele. No puedo decir que fue porque juramos no desvelarlo, nuestra reputación está en juego. Sólo puedo decir en nuestra defensa que la botella de vino que casi acabamos igual contribuyó a nuestra enajenación.
El domingo escuché esta canción… no la recordaba pero siempre me ha inspirado buen humor, de las de cantar a pleno pulmón… he puesto la letra en plan karaoke pero va un poco rápido…
Hoy hace 15 años que encontraron muerto a Kurt Cobain, como se han encargado de recordarnos todos los medios de comunicación.
Madre mía, 15 años ya… y la de batallitas que podemos contar cada uno de nosotros sobre eso. Porque yo recuerdo como me enteré. Lo escuché por Radio 3 en el radio despertador que tenía en la habitación del colegio mayor…
Aunque no marcó mi vida, la verdad. Ese día fui a clase, o no, no recuerdo. Estudié, o no, no recuerdo. Y salí a tomar algo, o no, no recuerdo. Lo que está claro es que nada de esto lo hice o lo dejé de hacer por su muerte.
Sin embargo esta efeméride me ha hecho parar a pensar en como hemos cambiado yo y mis circunstancias después de todo este tiempo, que 15 años son muchos. La verdad es que nada es como en aquel entonces pensaba que sería.
No, no llegué a ser ingeniero. Y no, no tengo una casa maravillosa, de hecho, ni siquiera tengo casa. Tampoco abrí la tienda de discos, es verdad. Y mi grupo de indie-pop nunca llegó a ser algo más que un proyecto en mi cabeza aunque de vez en cuando sigo ensayando coreografías en mi habitación pero nunca más he vuelto a torcerme un tobillo saltando de la cama…
Pero todo lo demás lo hice. Tengo 15 años más, eso estaba previsto y lo he cumplido. He leído muchos libros desde entonces y he visto muchas pelis en el cine, eso también lo he cumplido. Lo de comprarme discos lo he cumplido a medias, pero es que entonces no existía el e-mule y no sabía que para escuchar música no hacía falta comprar cd. Ah!!! y he adelgazado, que ahora ya no tengo que ir a la panadería a por bollos porque no me gusta la comida del colegio!! Lo que no he vuelto a hacer es comer melocotones. Después de tantas comidas y cenas teniendo que tomarlos como postre no he podido volver a probarlos, que se le va a hacer… no he podido superar la fobia.
Siempre me ha gustado rodearme de gente que sabe apreciar el arte en cualquiera de sus expresiones pero sobre todo de todos aquellos que son capaces de crearlo. Me gusta la gente creativa que es capaz de hacer algo que yo soy incapaz.
La verdad es que lo intento pero hay cosas para las que tienes que nacer, no se pueden aprender.
Primero lo intenté con el baile… mis participaciones en el Pregó infantil todavía se recuerdan. Yo me concentraba, ensayaba a conciencia pero el resultado inexcusablemente era el mismo, yo solita era capaz de desbaratar al resto del grupo y organizar un verdadero caos en medio de la calle sin orden ni concierto.
Como vi que esto no funcionaba lo intenté con el dibujo. Fui a clase todo un invierno y al final de curso el profesor me invitó a no volver al año siguiente, ¡pero si combinaba bien los colores y era la única que no se ensuciaba!
A esto le siguió algún que otro deporte que mejor no comentar.
Y finalmente la música. Pero aquí he de decir en mi defensa que después de seis años asistiendo a clases de guitarra casi, casi aprendí a afinarla.
Ahora he decidido explorar nuevos territorios y estos últimos días los he dedicado a aprender a hacer ganchillo. Sí, ganchillo. Eso que se hace con un ovillo de hilo y un gancho que sirve para tejer. Sí, lo que estás pensando, con lo que se hacen esos tapetitos tan monos que se ponen encima de la tele o sobre el respaldo del sofá, sin olvidarnos de esas fundas para rollos de papel higiénico que no me atrevo a adjetivar.
Al principio me parecía muy difícil pero después de destrozarme un dedo y metros y metros de lana creo que le he pillado el punto y que la cadeneta no tiene secretos para mí.
Mi intención es hacer gorritos de colores para el verano, para ir a la playa y esas cosas. Lo de los tapetitos lo dejaré estar de momento. Este invierno ya hice gorros con agujas y no me quedaron tan mal. Pero de momento, o me quedan demasiado grandes o demasiado pequeños. Yo sigo probando. No pierdo la esperanza de convertirme en la gran diseñadora de gorros de punto. Ya me veo en la portada del Elle... uf!
P.D.: admito encargos y no, el de la foto no lo he hecho yo, lo he encontrado en google.
En cuanto a la canción, no tiene nada que ver con el texto pero es que no he encontrado ninguna que hable de hacer trabajos manuales!!!!
Hoy he de confesaros una cosa… Nunca me ha gustado la poesía.
Nunca me ha gustado la poesía principalmente porque cuando estaba en el colegio me hicieron leer textos que o no entendía o me quedaban muy lejanos así que, simplemente, la descarté. Esta situación ha provocado que hoy en día sea una auténtica ignorante en esta materia y que necesite de la ayuda de los amigos para poder descubrirla poco a poco.
Estas Navidades alguien me regaló una antología de poetas del 27, algo que le agradezco y que prometo leeré en cuanto acabe los dos libros que llevo entre manos, y ayer una amiga me hizo leer el que dice es su poema preferido y que os he copiado más abajo.
Y de repente me he dado cuenta de que sí que entiendo la poesía. Que lo que antes era oscuro e ininteligible para mi, ahora tiene sentido y, a veces, hasta me gusta, si no es muy enrevesada, claro, que una tiene sus limitaciones. Ya se que quien lea esto puede pensar que soy tonta, quizá sea verdad… pero esa es otra historia…
Bueno, y no me enrollo más, aquí os dejo con Vicent Andrés Estellés…
Els amants
No hi havia a València dos amants com nosaltres.
Feroçment ens amàvem des del matí a la nit.
Tot ho recorde mentre vas estenent la roba.
Han passat anys, molts anys; han passat moltes coses.
De sobta encara em pren aquell vent o l'amor
i rodolem per terra entre abraços i besos.
No comprenem l'amor com un costum amable,
com un costum pacífic de compliment i teles.
Es desperta, de sobta, com un vell huracà,
i ens tomba en terra els dos, ens ajunta, ens empeny.
Jo desitjava, a voltes, un amor educat
i en marxa el tocadiscos, negligentment besant-te,
ara un muscle i després el peçó d'una orella.
El nostre amor és un amor brusc i salvatge,
i tenim l'enyorança amarga de la terra,
d'anar a rebolcons entre besos i arraps.
Què voleu que hi faça! Elemental, ja ho sé.
Ignorem el Petrarca i ignorem moltes coses.
Les Estances de Riba i les "Rimas" de Bécquer.
Després, tombats en terra de qualsevol manera,
comprenem que som bàrbars, i que això no deu ser,
que no estem en l'edat, i tot això i allò.
No hi havia a València dos amants com nosaltres, car d'amants com nosaltres en són parits ben pocs.
